Es evidente, no sé si por moda o necesidad, que cada vez más y más gente tiende a reciclar las cosas. O por que están concienciadas con el medio ambiente. Yo soy una de esas personas. Siempre se le puede dar una segunda oportunidad a las cosas. Reciclarlas quiero decir.
El ejemplo que os quiero enseñar hoy es el de unos cuadros "heredados" que mi suegra iba a retirar. Me los ofreció para la habitación de mi hija y, por supuesto, enseguida vi las posibilidades. Eran unos cuadros con unos marcos en color burdeos que no encajaban muy bien con la decoración de esa habitación. Además las láminas eran de unas mariposas que no me gustaban nada.
¿Como los reciclé? Primeramente les quite el cristal y lijé los marcos para luego darles dos manos de esmalte acrílico. En cualquier tienda de manualidades o bricolaje podéis encontrar una inmensa variedad de colores. Yo escogí el color marfil. Como las láminas no me gustaban recorté las mariposas para que quedase un hueco oval que me permitía usarlas como un falso passepartout.
Una vez arreglados los marcos imprimí algunas imágenes de las muñecas Gorjuss, que a mi hija le encantan, y ya está. He aquí el resultado.
Espero que os haya gustado.
Hasta la próxima!!!